Esparreguera Aimada: Algunas referencias históricas sobre la antigua alfarería de Esparreguera

dissabte, 24 de març del 2007

Algunas referencias históricas sobre la antigua alfarería de Esparreguera

De la prehistoria hasta el siglo XVIII.





“Oficio noble y bizarro,
entre todos el primero,
pues en la industria del barro,
Dios fue el primer alfarero
y el hombre,
su primer cacharro...”



    La primera vez que oiría estos versos fue durante una conferencia dada por el desaparecido esparreguerense residente en Sabadell Rafel Subirana Ollé, durante la década de los felices años ochenta.

    La conferencia, tenia por titulo el rimbombante nombre de “Un Museo en Esparreguera, una urgencia cultural”... De hecho, era la segunda conferencia sobre este tema que nos ofrecía. Si bien, aquella primera fue dada muchísimos años antes.
Unos versos que encontramos transcritos igualmente en uno de sus trabajos de investigación publicados en el año 1962.

    En aquella conferencia -en la cual tuve la suerte de asistir- con la sencillez y calidad humana que siempre presidió la vida de este ilustre esparreguerense, se nos recordaría la necesidad de crear un museo local, para salvaguardar nuestro patrimonio histórico y cultural, para las nuevas generaciones. Dándonos unas orientaciones sobre su creación, y posibles temáticas para del mismo...

    Como no, el autor, nos propondría la creación de unas secciones dedicadas a la historia de la alfarería y cerámica esparreguerense, como reconocimiento de esta tradición histórica en nuestra villa, como también otra sección destinada al teatro local.

    Esta Fiesta Mayor de invierno, por las fiestas de nuestra Patrona Santa Eulalia, tendría lugar la inauguración de un conjunto escultórico destinado a testimoniar al publico local y forastero nuestras raíces artesanales.

Escultura inaugurada durante la Fiesta Mayor de invierno de Esparreguera, 
obra del conocido artista Ramon Cuello Riera


    Efectivamente, el conjunto se emplazaría en la plaza de Santa Eulalia –popularmente llamada “plaça de l’Església”- esquina calle Balmes. En el sector ajardinado que existe delante de la puerta principal de nuestra iglesia parroquial. Un espacio habilitado donde se colocaría el conjunto escultórico que representa la figura de un alfarero trabajando con el torno -a medida real- obra del escultor local Ramón Cuello Riera.

    Una buena noticia, que se puede acompañar de algunas noticias antiguas sobre las familias de alfareros, ceramistas, ladrilleros y otros profesionales de la industria del barro que han residido en nuestra localidad. Si bien, el espacio nos impone ser breves, pues sus orígenes se pierden en la noche de los tiempos...

    Gracias a las investigaciones y trabajos arqueológicos de J. de C. Serra Ràfols, Rafel Subirana Ollé, Antoni Gastón y del Eleuteri Navarro, hoy día conocemos zonas que han estado habitadas desde la antigüedad en nuestro termino municipal. Principalmente el sector llamado de “Can Paloma”.

    Interesante resulta el trabajo del director del Instituto de Prehistoria y Arqueología de la Diputación de Barcelona D. Jordi Rovira Port, que nos detallaría piezas halladas en aquel sector antiquísimas. De la época llamada neolítica antigua en nuestro país. Piezas de alfarería con una antigüedad datable que situaríamos entre los 5.000 a 2.300 años antes de la Era Cristiana.
    Son estas piezas de Esparreguera restos de la cerámica llamada “cardical” o también llamada “impresa”, ya que en su superficie externa, -incluyéndose el labio de la pieza-, se acostumbraba decorar por medio de impresiones o incisiones hechas con la pechina o concha llamada “Cardium edule” y otros instrumentos como punzones, espátulas y madera. Se trata pues, de una cerámica hecha a mano.

    Otras piezas halladas por los investigadores nos hablarían de pequeños vasos de la etapa Calcolítica o Encolítica. Esto es, del 2300-2200 hasta los 1900 años antes de nuestra Era.

    De la época del Bronce tenemos también cerámica en todas sus divisiones arqueológicas. Se trata de una alfarería de recipientes grandes, hecha a mano. Si bien, ya se utiliza en estos casos el torno lento. Es decir, un torno girado a mano, a velocidad muy inconstante, para la elaboración de ollas y otros elementos más pequeños.

Detalle de pizas halladas en Esparreguera correspondientes
al Bronce Antiguo (1900/1800 hasta 1500 años).




    De la cerámica llamada “Campaniforme” con elementos decorativos ya más diversificados, correspondientes al periodo del Bronce Antiguo también tenemos en nuestra localidad. Su datación deberíamos situarla entre los años 1900-1800 al 1500 antes de la Era Cristiana.

    Por su parte de la edad del Bronce Medio, esto es del 1500 hasta 1100 antes de nuestra Era, se han recuperado diversos elementos. Como también los restos de un curioso colador de líquidos. Así como otros restos cerámicos correspondientes al periodo, el Bronce Final (1100 hasta el 700)
    De la época ibérica se conserva cerámica encontrada en Esparreguera a nivel superficial.


Piezas del Bronce Final de Esparreguera 
(1100 hasta el 700 ante de nuestra Era)


    Curiosamente en dos yacimientos situados a las antípodas de su demarcación. Muy distantes la una de la otra: en los sectores llamados “El Castell” y el “Cul de la Portadora”.
    Aquí se trata de restos de ánforas y grandes recipientes ya fabricadas con torno rápido.
Josep Paulo y Joaquim Creus nos pondrán énfasis recordándonos que son piezas exentas de decoración con la típica cocción bicolor, con una antigüedad aproximada que Ellos situaran sobre unos 2000-2500 años.

    Los incansables esfuerzos de Rafael Subirana nos traerían las pruebas arqueológicas de la presencia ibérica y romana en nuestra demarcación municipal.
    De la época ibérica recuperó fragmentos de ánforas y otros recipientes grandes ya elaborados con un torno rápido y de cocción bicolor. Con una antigüedad estimable que situaríamos entre los 2000-2500 años. Excepción de un jarrón negro encontrado por el mismo investigador en la zona llamada “de El Castell” dentro de unos silos excavados en piedra, que posiblemente los iberos destinaban a guardar grano.
    Se trataría aquí, de un recipiente de cerámica barnizada de color gris oscuro, -igual a otras piezas halladas en la antigua colonia griega de Ampurias- que nos hace especular sobre un hipotético intercambio comercial en este caso concreto.

    Otro material de arcilla encontrado de la época de dominación romana seria de tipo funerario. La necrópolis descubierta por el mismo Rafel Subirana en Esparreguera nos recuperaría varias tumbas elaboradas con el popular “tegulae” romano, que, por el análisis óseo de los restos humano todavía conservados en el interior de las tumbas deberíamos de situar su datación entre los siglos I y II después de Jesucristo.


Restos del castillo de Esparreguera, cercanos a la iglesia románica de Santa Maria del Puig


    De la época medieval encontraremos abundante cerámica entre los siglos XII al XV. El mismo Subirana nos recordaría como en el sector de “ la Vinya Vella y en el lugar donde existía el castillo del Señor Barón de Esparreguera situado en una punta del llano donde se encuentra la primitiva parroquia de Santa Maria del Esparreguera, conocido actualmente por Santa Maria del Puig, de construcción románica, son dos puntos del término donde los descubrimientos han estado más importantes por lo que hace referencia a la cerámica medieval..” [Traducido al castellano].

    Otros autores nos recuerdan la cerámica medieval de la localidad situándola en los siglos XII-XIII. Los investigadores Paulo y Creus hacen referencia a fragmentos incrustados en la pared oeste de esta misma iglesia de Santa Maria del Puig.

    Igualmente recordemos los investigadores Josep Puig Jorba, y Rafel Subirana Ollé, que recogieron y catalogaron una muy rica cerámica decorada correspondiente a los siglos XII al XVII hallada en nuestro termino municipal. Sin embargo, por el momento, nos falta la confirmación documental de su fabricación decorativa en nuestra localidad.

Colección de fragmentos de ceràmica medieval recuperada en Esparreguera por el investigador
Josep Puig, 
publicado en su catalogo del año 1995


    Cabe señalar aquí la curiosidad de observar como el alfarero de nuestra localidad, como en otras, adoptaría como denominación de su oficio aquel producto que elaboraba.
    Así, el artesano que se especializaba en hacer ollas, muy orgullosamente señalaba su nombre o apellido, apostillando acto seguido su oficio de ollero, o de botijero, o de ladrillero, o el de tejero, o escudillero...
    Señalemos que estos artesanos siempre se acompañarían con su oficio especial y no genérico. Es decir, en aquello en que se habían especializado dentro del mundo de la alfarería y del barro.

    Diversos documentos nos hablaran de antiquísimas familias de nuestra localidad dedicadas al mundo de la alfarería y a la industria del barro. Me permitirán no extenderme en este aspecto y omitir la información literal hallada en los “Capbreus” del siglo XV y XVI. Pero si deberemos nombrar algunos datos que afloran cruzando fuentes documentales, como los registros parroquiales recuperados por Lluis Artigas y las declaraciones notariales de Josep Paulo, con la bibliografía existente.

    Por ejemplo, ya en el lejano año de 1538 nos aparece un tal Salvador Torrents, botijero establecido en la actual calle “de l’Hospital” [Calle Hospital]. Posteriormente, en un “Fogatge” del año 1553 encontraremos igualmente a un vecino de apellido Boada, especializado igualmente en botijos. De este siglo son también las referencias de varios ladrilleros como Joan d’Eixarc apodado “lo biscai” (1547), Joan Pagès (1572) y Janot Torres Lluís Artigas nos transcribe la partida de bautizo de una de sus hijas de nombre Maria Ana. Apareciendo el padre como Joanot Torra:

“Maria anna filla del senyer en Janot torra ragoler y de eufrayna mullersua fonch batejada a XII de noembre any 1568 foren padrins lo barber y maria anna doncella filla den berth rovira tots de dita vila”.

    Desinencias que son habituales en el trabajo de investigación local. Como el caso que hace referencia a los bautizos de tres hijos (05.02.1571; 06.03.1573 y 25.07.1574) del matrimonio del ladrillero local “... en joan fages rajoler ideas muller margarida...” que nos aparecerá manuscrito indistintamente el apellido Fages como Faijes.

    Unos años después nos aparecen otras referencias de la familia Boada: Pere Boada (1581) y Vicenç Boada (1595). De la misma fecha que el ultimo, -que corresponde a una lista de oficios de la localidad de Esparreguera-, recuperamos a un tal Salvador Torrents botijero. Al parecer, ambos, los Boada y los Torrents poseían sus obradores en una misma calle. 
    Un poco anterior seria el bautizo del pequeñín Joan, celebrado el 27 de diciembre del 1588 y que era hijo de Salvador Torrens botijero. Como nos refiere el documento con variaciones manuscritas, refiriéndose a un bautizo doble celebrado en nuestra parroquia: “Vuy a XX7 de desemb[re 1588 fonch?] batejat joan ÿ guilem lo joan [fou de?] salvador torens cantarer de dita vila y de joana muler sua foren padrins joan cusana ÿ fran[ina?] barbarana y de guilem lo pare se diu joan font y la mara catarina foren padrins guilem hubach y estafania py doncella ministre mauri[dcy?] (1586 y 1572).     De este ultimo con variantes graficas según el documento de que se trate. En uno de los trabajos publicados sobre los registros parroquiales de Esparreguera, mo[rell?] ”.
    Es una realidad local innegable la repetición de algunos apellidos familiares a esta noble y antigua profesión o oficio, como se podrá ver, en el transcurrir de los siglos.

    Para el año de 1603 encontraremos un registro que nos habla de un tal Pere Boleda botijero. Los registros de permisos de matrimonio del año 1611 nos hablaran de un ladrillero [rajoler en lengua catalana] de origen francés llamado “Domingo Tisach regoler del regna de frança”.
    En fecha posterior, encontraremos un el testamento datado con fecha del 19 de agosto del 1625 aflora otro Pere Boada botijero hijo de Pere BoadaTamariu.

    Así en el año 1635 nos consta también el taller de Salvador Torrents y Onofre Torrents padre e hijo. Otro Joan Torrents, botijero, nos aparecerá casado con una chica llamada Elisabet, y con diversas propiedades en el “carrer Major” [Calle Mayor] de nuestra localidad. Con el referido nombre de Salvador Torrents botijero nos reaparece en documentos fechados en 1638.

    Los protocolos notariales del año 1663 nos hablaran de un Vicenç Ortells de oficio botijero.

    Onofre o Nofre Torrentsdependiendo de cómo se escribe en diversos los documentos- aparece repetidamente. Se trata de un esparreguerense especializado en la realización de ollas de barro, como reseña el manuscrito de la declaración de su viuda Marianna. Como aparece en el manuscrito del año 1667 en que nos dice “Marianna Torrents viuda deixada del quondam Onofra Torrents, oller de la vila d’Esparreguera, del bisbat de Barcelona, com a senyora y majora y usufructuaria y tenutaria dels bens que foren del quondam son marit....”, refiriéndose también a su obrador situado en la calle Hospital de Esparreguera. Donde se localizaba la desaparecida bodega Marin, y la actual sede del fotógrafo Joan Puig Font.

    El mismo año también debemos recordar los de una propiedad situada en la calle que actualmente llamamos Balmes de nuestra localidad, de Pere Rosell, también botijero. Propiedad comprada a Miquel Rovira en el año 1617. Un lugar también conocido por el sobrenombre de “Cal gravat o Cal Pasqual”.
    De este mismo período serán las referencias de otro alfarero de ollas llamado Jaume Santamaría (1667) y las referencias de su casa situada en el antigua camino que conducía a Montserrat. Curiosamente los mismos datos aparecerán más tarde de un Jaume Santamaría, ollero, dándonos noticias de su obrador y horno de cocción en el año 1703.
    Posteriormente otro Pere Santamaría, también botijero, -fallecido el 25 de julio del 1758- nos aparecerá casado con una chica llamada Eulalia Torrents. Nuevamente, se cruzaran los apellidos de familias muy arraigadas en la industria del barro local.

    Más adelante reaparecerá otra vez el curioso nombre de Onofre Torrents. Las tradiciones familiares, al parecer, son difíciles de cambiar y pasarán de generación en generación. Esta vez se repetirán los nombres con un siglo de diferencia. Posiblemente este Torrents alfarero moriría en el año 1756. El rastro de los alfareros de Esparreguera continua...

    Reseñemos aquí la opinión del investigador local Josep Paulo que nos dice que después de la nombrada familia de alfareros de apellido Boada se instalarían en Esparreguera la familia de alfareros apellidada Gonzales, oriundos de la localidad de Calanda (Teruel). Según sus tesis el matrimonio González, formado por Sebastiàn González, alfarero, y su esposa Anna tenían un hijo llamado Antoni que se casó con Maria Badia el 28 de octubre del año 1681.

    De hecho, todavía se conserva el permiso de matrimonio solicitado al Obispado de Barcelona para su celebración, fechado con posterioridad. Como refiere Lluis Artigas en uno de sus trabajos, nos transcribe la partida literal que dice en catalán antiguo: “Die 28 10bris 1681. t. Gonsales gerrer de Calandre Bisbat de Canys de Arago ab t. Badia Esparaguera......... 8 s."

    Como podemos ver, efectivamente eran oriundos de Calanda, partido judicial y obispado de Alcañiz en Teruel. El documento no nos refiere el nombre propio de cada consorte utilizando la abreviatura “t” de “tal persona”... pero sí en cambio los apellidos.

    Cabe señalar también la noticia que da Paulo sobre un tal Joan Badia que en el año 1667 ya estaba casado con una Maria González, hija de Jaume González alfarero. Señalando la posibilidad de que este Badia ya fuese alfarero, por la costumbre de casarse las familias con gente de un mismo oficio.
    Un mismo Salvador Badia nos aparece durante el siglo XVIII como ladrillero de la localidad de Esparreguera.

    En esta línea de investigación señalemos la coincidencia del matrimonio de una chica de llamada Badia con un “ladrillero” de apellido francés: Raubert. Que tramitarían su licencia matrimonial para casarse en Esparreguera el 1 de marzo de 1683. Curiosamente el mismo año en que otro muchacho llamado Pallares, también ladrillero, tramitaría un 30 de agosto, su matrimonio con una chica de apellido Pujol.

    Retomando el tema decir que sabemos también de uno de los hijos de este matrimonio llamado Antón González Badia que continuaría con el oficio familiar casándose con Jerónima Monner el 10 de diciembre del año 1713 y falleciendo el 12 de febrero del 1767. Otras licencias matrimoniales nos aportan datos de alfareros. La fechada a 1 de mayo de 1742 nos recordaría el enlace de “ Jaume Gonsales gerrer de la vila de Esparaguera...” con la pierense Francesca Alba. La fechada a 28 de mayo de 1790 nos habla de “Antón Gonsales jove gerrer” que se enlazaría en Esparreguera con una mucha llamada Cecilia Reynes.

    Los rastros de nuestros artesanos afloran en el transcurrir de los años. En el año 1798 encontraríamos al esparreguerense Ramón Soler, tinajero... Otros linajes de alfareros serian los Mach. Una saga de artesanos como Pau Mach Solà (1773), Joan Mach Reinés (1807), Joan Mach Brugueras (1838), Joan Mach Barquet y más tarde los hermanos Joan y Aleix Mach Masdefiol.
    Vemos otro Rafel Soler alfarero en el año 1821, Celdoni Riu seria propietario de una alfarería en el año 1827... la lista se nos hace interminable...

Detalle de la escultura de Ramón Cuello.


    Sea este breve trabajo el homenaje escrito que complementa la belleza de la obra escultórica elaborada por el eminente artista Ramón Cuello.

    Solo unas manos de artista como Él, podían hacer aflorar la fuerza y el amor que pone todo alfarero o ceramista en la creación de su obra. No se podía rendir mejor homenaje a las tradiciones de nuestra localidad.






Fuentes:

AHE censo del 1837.
ACA Fogatges de 1553. Volumen 2598, folio 87. Sección Real Patrimonio.
ACA Capbreu de 1581, año de 1667 folio 104; año de 1703 folio 55 y 179.
ACA Protocolos Llobregat, manual 203 (Año 1598)
ACA Manual Llobregat, manual 489, folio 175 (Año 1798)
ACA Libro testamentos, folio 175, (Año 1625)
ACA Manual 291, folio 250. (Año 1538)
ACA Manual 291, folio 250 (Año 1638)

Obras citadas:

Artigas Jorba, Lluís
·Esposoris Esparreguerins. Recopilació històrica de les llicències de matrimoni. Esparreguera de 1610 al 1633
(Esparreguera 1995)
·Esposoris Esparreguerins. Recopilació històrica de les llicències de matrimoni. Esparreguera de 1723 al 1755
(Esparreguera 1996)
·Esposoris Esparreguerins. Recopilació històrica de les llicències de matrimoni. Esparreguera de 1784 al 1791
(Esparreguera 1993)
·Esposoris Esparreguerins. Recopilació històrica de les llicències de matrimoni. Esparreguera de 1681 al 1723
(Esparreguera 1996)
·Esparreguera durant el segle XVI. (2) Recull històric de naixements. Anys 1562 al 1569. (Esparreguera 2000)
·Esparreguera durant el segle XVI. (3) Recull històric de naixements. Anys 1570 al 1574. (Esparreguera 2001)
·Esparreguera durant el segle XVI. (5) Recull històric de naixements. Anys 1587 al 1590. (Esparreguera 2002)
Gaston Antón; Navarro, Eleuteri
·La Cova de Can Paloma. Jaciments prehistòrics. (Esparreguera 1985).
Maluquer de Motes, Joan
·Prehistoria i Edat Antiga. (Barcelona 1987)
Puig i Jorba, Josep
·Mostra de cerámica decorada dels segles XIII al XVII descoberta a Esparreguera. (Esparreguera 1995)
Paulo i Sàbat Joseph; Creus i Mach, Joaquim
·Terrissers i terrisseries d’Esparreguera. (Esparreguera 1998).
Rovira i Port, Jordi
·“L’Esparreguera vàries vegades mil·lenària: la Cova de Can Paloma”. La Cova de Can Paloma. Jaciments prehistòrics (Esparreguera 1985).
Subirana i Olle, Rafel
·El Cementiri de la Gorgonsana. (Esparreguera 1948)
·El poblament d’Esparreguera abans de l’any 985. (Sabadell 1985) [Text de la conferencia donada el dia 16 de febrer del 1985].
·“Interpretació històrica de la cerámica montserratina de la Vinya Vella”. Estudis Esparreguerins. Quadern VI. (Sabadell 1962)
·“Notes per la història de la Industria de la terrissa a Esparreguera”. Estudis Esparreguerins. Quadern VII. (Sabadell 1962).
“Algunes consideracions referent a l’Esparreguera Romana”. Estudis esparreguerins. Quadern X. (Sabadell 1962)